Sin categoría

La fascinante logística del vino

Introducción

Si elaborar vino es un arte, su logística para que llegue a cada mesa, también lo es. Y es que este producto, que recibe tantos mimos desde la vendimia hasta la mesa, requiere una buena cadena logística para garantizar su calidad. 

En este artículo, exploraremos las particularidades de su manejo desde nuestra perspectiva, las mejores prácticas para su transporte y almacenamiento, además de las innovaciones que están transformando esta industria.

Particularidades del vino en la logística

El vino es un producto sensible a múltiples factores. Su calidad puede verse afectada por la temperatura, la luz y la humedad durante su traslado y almacenamiento. 

Según las recomendaciones de almacenamiento de vinos de Christian Butzke, profesor de Enología en la Universidad de Purdue (EE. UU.), la temperatura ideal para conservar el vino se encuentra entre 10 y 16 °C.

Cuando se almacenan a temperaturas inferiores a 10 °C, los vinos podrían no alcanzar su máximo potencial en aroma y sabor. Por el contrario, temperaturas superiores a 16 °C pueden favorecer el crecimiento de microorganismos, lo que puede provocar sabores indeseados, turbidez en el vino y un exceso de dióxido de carbono.

Además, la luz también desempeña un papel crucial en la conservación del vino. Estudios han confirmado que la exposición a los rayos solares puede alterar su sabor, reducir su longevidad y afectar su consistencia.

Por ello, es fundamental usar una buena cadena de frío para su transporte, gracias a contenedores refrigerados o “reefer”. En Grupo Cabeza, contamos con este servicio.

Transporte del vino

La clásica imagen que todos tenemos en la cabeza, es el formato de botellas de vidrio, agrupadas en cajas y paletizadas. Pero también se transporta como bag-in box (o sencillamente BIB) y latas de aluminio, formatos que hemos visto que han ganado popularidad en los últimos años. 

Cada formato tiene sus pros y contra. Las botellas de vidrio son clásicas y elegantes, garantizan una diferenciación de marca de cara al consumidor final, pero también por su peso, incrementa los costes logísticos. Veamos otros formatos:

  1. Bag-in-box (BIB): 

Consisten en una bolsa flexible hermética dentro de una caja rígida de cartón, protegiéndolos del aire y la luz para mantener su calidad. Se usaban en un principio para vinos a granel o económicos, pero hoy día podemos encontrar opciones de vinos premium, exclusivos, e incluso alguna edición limitada que utiliza este tipo de presentación, gracias a su menor impacto al medioambiente. 

  1. Latas de aluminio para vinos: 

La lata de aluminio para vinos, es un formato que va ganando terreno. Muchas marcas recurren a un recubrimiento interno en las latas para preservar el sabor original del vino. Se espera que el mercado internacional de vinos enlatados, crezca un 13,2% anual hasta 2028, según la consultora estadounidense Grand View Research. Incluso, ya hay vinos con denominación de origen que utilizan este formato. 

  1. Nuestra solución: El flexitank

En nuestro caso para exportación, el flexitank se presenta como una solución excelente. En apariencia es un container normal por fuera, pero por dentro contiene una enorme bolsa expandible que conserva fielmente los atributos del producto. 

Este sistema permite transportar grandes cantidades de vino o mostos de forma eficiente y segura, reduciendo costes y asegurando la calidad del producto.

Almacenamiento y gestión de inventarios

El almacenamiento adecuado es crucial para preservar la calidad del vino. Las condiciones ideales incluyen:

  • Una temperatura constante en el almacén: Entre 10 y 16 grados Celsius, en línea con el contenedor “reefer”.
  • Humedad adecuada: Entre el 60% y el 70%, para evitar que los corchos se sequen.
  • Oscuridad: Los rayos UV pueden degradar el vino, especialmente los blancos y rosados.

En cuanto a la gestión de inventarios, una rotación eficiente es vital. El método “FIFO” (First In, First Out) asegura que las partidas más antiguas se distribuyen primero, manteniendo siempre un stock fresco. Además, una gestión eficaz reduce riesgos de deterioro y garantiza una disponibilidad continua para el mercado.

Innovaciones en la logística del vino

La tecnología está transformando la industria vinícola, y la trazabilidad es una de las innovaciones más demandadas. Los consumidores valoran cada vez más la autenticidad y el origen de los productos que consumen, y el blockchain ha surgido como una herramienta revolucionaria en este aspecto.

Gracias a esta tecnología, es posible certificar el recorrido del vino desde su vendimia hasta el consumidor final, garantizando la transparencia y la confianza en la calidad del producto. Un código QR en la botella puede ofrecer al cliente detalles como el año de cosecha, la ubicación de la viña y los procesos involucrados en su elaboración.

En Grupo Cabeza, entendemos que la logística del vino es un desafío que requiere experiencia, tecnología y compromiso. Estamos aquí para ayudarte a que cada botella llegue en perfectas condiciones a su destino, lista para brindar una experiencia inolvidable.

Author


Avatar